Elecciones y nuevas tecnologías
By Redacción, News
Lunes de resaca electoral, momento de reflexión y análisis para los partidos, de concretar en qué se ha fallado y dónde se puede mejorar. Después ya veremos si se forma o no gobierno…
Independientemente de eso, hoy vamos a analizar un tema sobre el que hay abierto un debate desde hace tiempo: el uso que podemos darle a las nuevas tecnologías en materia electoral.
En este sentido, España se encuentra a la cabeza del pelotón, como se pudo comprobar en las elecciones de diciembre. En esa ocasión, el 90% de los votos fue escrutado en poco más de dos horas. La responsable fue Scytl (que ha desbancado a Indra) y sus funciones fueron: transmitir y publicar cifras de participación y resultados; llevar un control de las mesas electorales y un recuento sobre los datos de censo y resultados. Para el 26J, Indra ha recuperado su puesto y a través de las 22.265 tablets que repartió, realizó el recuento en los centros electorales.
A pesar de lo avanzados que estamos en temas de recuento, nuestra asignatura pendiente sigue siendo el voto por internet. Aquí nos encontramos dos impedimentos principales: la brecha digital y la desconfianza de los votantes.
La primera es obvia, hay un porcentaje importante de los votantes españoles (23% según estudio de UGT) que no ha utilizado nunca internet. Por otro lado, la desconfianza de los ciudadanos puede poner en jaque el sistema más seguro del mundo. Da igual que se asegure que el voto es fiable si la ciudadanía no lo ve así.
¿Solución? Lo más lógico sería ir añadiendo elementos tecnológicos paulatinamente, y continuar hasta que se llegue al voto por internet, lo que probablemente influirá muy positivamente en la participación ciudadana.